Por segundo año consecutivo, este año tampoco podremos disfrutar de unas fiestas Josefinas en su máximo esplendor. Este 2021 tampoco podremos desfilar con la indumentaria valenciana. Una vez más, no podemos sacar los monumentos en las plazas y calles de Benicarló y el tránsito de vehículos tampoco se verá afectado. Tampoco realizaremos la ofrenda a nuestra virgen y el casal fallero no será nuestra segunda casa.
No podremos disfrutar de las torradas entre amigos y familia.
Pero lo que tengo claro es que tal y como conocemos la fiesta, cambiará completamente.
Este año, ante todo lo sucedido, tenemos que mantener la calma y reservar todas nuestras ganas de celebrar fallas. Para cuando el año que viene se puedan celebrar con la máxima seguridad posible.
Eso si fallas en marzo…
Muchos pensaréis un fallero pensando en las fallas 2022, pues la contestación es fácil; aparte de fallero, soy personal socio sanitario y convivo con personas que llevan más de un año cumpliendo todas las normas sanitarias y en ocasiones han sido muy estrictas.
Por otro lado, personalmente soy del pensar que las fiestas tienen su época y no deben moverse en la agenda anual según intereses, ya que celebrar las fallas en verano tiene sus pros y contras.
Muchos son los festejos que hemos de seguir privandonos si queremos que en 2022, podamos disfrutar plenamente del año festivo.
Mantengamos la llama de las fallas viva, pero con responsabilidad.
¡Viva las fallas de Benicarló!
¡Viva la falla la Barraca !
Volveremos a plantar en las calles y plazas.
