Nota de Prensa de AGRETUR
𝘛𝘳𝘢𝘴 𝘭𝘢 𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘦𝘯 𝘮𝘢𝘳𝘤𝘩𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘯𝘶𝘦𝘷𝘢 𝘤𝘰𝘯𝘤𝘦𝘴𝘪ó𝘯 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘭í𝘯𝘦𝘢 𝘊𝘝-002 (𝘝𝘪𝘯𝘢𝘳ò𝘴-𝘉𝘦𝘯𝘪𝘤𝘢𝘳𝘭ó-𝘗𝘦𝘯í𝘴𝘤𝘰𝘭𝘢) 𝘥𝘦𝘭 𝘚𝘌𝘙𝘝𝘐𝘊𝘐𝘖 𝘗Ú𝘉𝘓𝘐𝘊𝘖 𝘋𝘌 𝘛𝘙𝘈𝘕𝘚𝘗𝘖𝘙𝘛𝘌𝘚 𝘋𝘌 𝘝𝘐𝘈𝘑𝘌𝘙𝘖𝘚 𝘌𝘕 𝘈𝘜𝘛𝘖𝘉Ú𝘚 𝘥𝘦 𝘭𝘢 𝘎𝘝𝘈, 𝘭𝘢𝘴 𝘲𝘶𝘦𝘫𝘢𝘴 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦 𝘭𝘢 𝘪𝘯𝘴𝘶𝘧𝘪𝘤𝘪𝘦𝘯𝘤𝘪𝘢 𝘥𝘦 𝘧𝘳𝘦𝘤𝘶𝘦𝘯𝘤𝘪𝘢𝘴 𝘺 𝘱𝘭𝘢𝘻𝘢𝘴 𝘴𝘰𝘯 𝘺𝘢 𝘥𝘪𝘢𝘳𝘪𝘢𝘴 𝘺 𝘤𝘰𝘯𝘵𝘪𝘯𝘶𝘢𝘴.
𝙀𝙡 𝙣𝙪𝙚𝙫𝙤 𝙩𝙧𝙖𝙣𝙨𝙥𝙤𝙧𝙩𝙚 𝙞𝙣𝙩𝙚𝙧𝙪𝙧𝙗𝙖𝙣𝙤 𝙨𝙚 𝙢𝙪𝙚𝙨𝙩𝙧𝙖 𝙞𝙣𝙨𝙪𝙛𝙞𝙘𝙞𝙚𝙣𝙩𝙚 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙖𝙗𝙨𝙤𝙧𝙗𝙚𝙧 𝙩𝙤𝙙𝙖 𝙡𝙖 𝙙𝙚𝙢𝙖𝙣𝙙𝙖 𝙙𝙚 𝙨𝙚𝙧𝙫𝙞𝙘𝙞𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙖𝙡𝙞𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙚𝙣𝙩𝙧𝙚 𝙤𝙩𝙧𝙖𝙨, 𝙚𝙡 𝙨𝙚𝙘𝙩𝙤𝙧 𝙩𝙪𝙧í𝙨𝙩𝙞𝙘𝙤 𝙘𝙤𝙢𝙖𝙧𝙘𝙖𝙡.
La reactivación del sector turístico comarcal ha traído consigo una nueva problemática que hasta el momento era poco patente y visible: las frecuencias y nº de plazas disponibles por vehículo de la flamante nueva flota de vehículos que cubren el servicio interurbano entre Vinaroz y Peñiscola se ha quedado corta; muy corta.
La falta de previsión o la falta de reacción a la vista de los problemas patentes y visibles por parte de las partes que gestionan y prestan respectivamente el servicio, han convertido este servicio “como uno de los que más quejas está generando entre los visitantes y turistas que acuden nuevamente este año a nuestras localidades, y muy especialmente a Peñiscola”.
Así lo destaca la AGRUPACION DE EMPRESARIOS TURISTICOS de PEÑISCOLA (AGRETUR) que, ante la falta de medidas correctivas, ha remitido recientemente por mail una misiva a la Directora General d’Obres Públiques, Transport i Mobilitat Sostenible de la GVA exponiéndole los problemas que se han detectado en la prestación del servicio, las nefastas consecuencias para la imagen de destino que genera esta situación, y a la que le han instado a “gestionar con la concesionaria de forma urgente las medidas correctivas que procedan”.
Y es que, han sido muy diversos los factores que han disparado en más de un 30% el uso de este servicio público de transporte colectivo:
• Por una parte la fuerte presencia nuevamente del turismo social en la comarca (y gran usuario de este servicio), que se desplaza en interurbano entre los núcleos turísticos y los centros de actividad comercial de las 3 localidades comunicadas. Esto genera grandes aglomeraciones de personas en muchas de las paradas de Peñiscola en ambos sentidos, a la par que colapsa la capacidad de los autobuses que terminan pasando de largo por muchas paradas por falta de capacidad para acoger a más viajeros.
• Por otra, el fuerte incremento en el precio de los carburantes debido a la crisis económico-energética por la guerra de Ucrania, que provoca que una importante cantidad de trabajadores comarcales (entre los que se encuentran los del sector turístico), han optado por usar el transporte público como medida eficaz de ahorro (al no tener que usar su vehículo propio, y además de evitar tener que hacer uso de las zonas ORA para estacionarlo).
• Y si el problema fuera poco, la amplia visita de nuevos visitantes a la comarca que han empezado a usar el tren como medio de transporte, y que precisan del autobús si o si para movilizarse desde/hacia sus destinos finales,. Esto ha sobre-saturado adicionlamente tanto la parada como las rutas que pasan por la estación de tren Benicarló-Peñíscola a determinadas horas.
Por tanto estas últimas semanas, y coincidiendo nuevamente con una mejora de la climatología, se han ido viendo diariamente paradas abarrotadas de personas, muchas de las cuales se han visto obligadas a esperar hasta casi una hora para poder subirse a un autobús, o desembolsar un mayor importe para volver a tiempo y en taxi a sus compromisos horarios, o incluso viéndose obligados a un retorno a pie de varios kilómetros. Un problema que a la par de la Semana Santa se ha agravado aún más por el uso adicional generado por los cientos de personas que, habiendo venido a pasar sus vacaciones entre nosotros, han optado por el transporte en autobús como forma sostenible de desplazarse entre los diferentes puntos de nuestras localidades.






















