La pasada semana se publicó una encuesta, encargada por el PSPV-PSOE de Vinaròs, en cuyo resultado se mostraba el aumento en un concejal, pasando de 7 a 8 ediles, del PSPV, el mantenimiento del número de concejales de PP y PVI, el aumento de concejales de Compromís, de 1 a 2, el descenso de 3 a 1 edil de TSV (o Podemos), y la aparición de 1 concejal de Vox.
Los resultados de una encuesta no predicen los resultados de las elecciones locales, ni mucho menos, pero sí permiten observar TENDENCIAS de voto, en función de los intereses de los encuestados, puesto que siempre son una muestra poblacional estadísticamente fiable con un determinado margen de error. También permiten diferentes lecturas, más o menos interesadas a partir de los datos presentados, no solo por quien encarga la encuesta, también por el resto de fuerzas políticas que interpretan esos datos de forma interesada, y manipulable.
Bien, permítanme comentar lo que pudieran parecer obviedades, a tenor, no solo de estos resultados, sino de conversaciones con ciudadanos de a pie, y leyendo los artículos que escriben otras fuerzas políticas, y declaraciones de esas otras fuerzas políticas:
Punto 1: La crispación de que determinados portavoces hacen alarde, no está calando en la opinión de una mayoría ciudadana. Sobre todo, si no va acompañada de propuestas claras acerca de qué Vinaròs se quiere, y cómo se quiere conseguir.
Punto 2: La nula presentación de propuestas de gestión por parte de la actual oposición no les permite llegar a alcanzar un numero significativo de concejales que les permita gobernar.
Punto 3: El desgaste de la acción de gobierno no parece haber afectado al PSPV-PSOE ni a Compromís.
Punto 4: Los/las ciudadanos/as no están de acuerdo con la crispación, excepto una minoría que deriva al extremismo, y no a una moderación.
El mensaje machacón de la oposición: “Los actuales gobernantes no han hecho nada”, por muy machacón, no cala en la ciudadanía. Quizá la ciudadanía recuerda la gestión del actual gobierno local durante la pandemia, y la nula presencia de la oposición durante casi media legislatura, puede que sea eso, señores y señoras de la oposición. Una legislatura donde se superó una crisis sanitaria, donde se construyó un centro educativo, el Jaume I, donde se han asfaltado más caminos que nunca, donde se han construido una serie de estructuras pluviales para reducir las inundaciones en la ciudad, donde se ha apoyado el mantenimiento de actividades hosteleras, comerciales, donde se ha reducido la fiscalidad en las acciones para reducir el cambio climático, donde se han extendido las ayudas a los grupos más vulnerables, donde se han mantenido y mejorado las estructuras de gestión administrativa, pese a lo farragoso de éstas, donde se han reparado infraestructuras viales, donde se ha ampliado el cementerio, donde se ha mejorado (comparativa de datos provinciales) la seguridad ciudadana… “NO HEMOS HECHO NADA”, por muy repetitivo que sea este mensaje, no cuela.
En una ciudad como Vinaròs, todavía somos muchos los que nos conocemos.
Fernando Juan – Concejal de RRHH y Cultura
