Ya empiezan las fiestas de San Juan y San Pedro y con ellas una de las tradiciones más arraigadas de Vinaroz, la tauromaquia, y una vez más como es costumbre, los autodenominados antitaurinos de Compromís hacen su particular escrito para llamar la atención, pero cuando gobiernan, no solo no lo denuncian, sino que lo permiten.
La semana pasada Compromís dijo en su nota de prensa “Reivindicamos un Vinaròs diverso, inclusivo y abierto, donde todas las personas que viven y conviven en nuestro municipio tengan derecho a celebrar sus tradiciones y creencias, siempre dentro del respeto mutuo y la legalidad, negar ese derecho a una parte de la ciudanía es profundamente injusto y peligroso”.
Tal y como está escrito parece que defienden a la cultura de la tauromaquia, pero no, tal y como se lee en esa nota defienden otra cultura, una que no es propia de los españoles: el sacrificio del cordero. Sacrificio que requiere degollar corderos sin antes ser aturdidos. Para ellos en el fondo, que un animal sufra más o menos no les importa, solo les importa obtener rédito electoral, aunque sea impulsando una tradición alejada de la base cultural cristiana de España.
Para VOX, el apoyo a nuestras tradiciones e identidad española es importante, sobre todo algo tan arraigado como son las novilladas o las corridas de toros. Por eso animamos a asistir, a disfrutar y a ignorar a aquellos que no defienden nuestros valores, sino los que pertenecen a otra cultura que no es la nuestra.
No existe ninguna normativa donde se prohíba la entrada a los menores de edad para que no disfruten de la cultura de la tauromaquia, por eso invitamos a todos los vinarocenses y visitantes a que disfruten de la cultura y tradiciones de esta tierra, y que lo hagan con la cabeza bien alta.
Josué Brito